Hoy me convencí a mi misma de darme por vencida, de renunciar a vos, de no esperarte más, de no seguir dando vueltas sobre el pasado. Tengo que aceptar que acá no hay más oportunidades, que el pasado para vos está pisado, y no hay marcha atrás.
Ya no importa la esperanza, no hay nada más que hacer, aunque te siga esperando, no vas a volver.
Siempre fui optimista, le puse una sonrisa a cualquier situación, siempre con la mejor onda, pero llega un momento que te cansa ponerle una sonrisa a todo, cuando la vida no te devuelve la sonrisa. Es ahí cuando te dan ganas de mandarlo todo a la mierda, de darte por vencida, de olvidarlo, y juro que esta vez lo voy a hacer.
Aunque no te niego, si el vuelve, mis puertas van a estar siempre abiertas, pero mientras tanto tengo que seguir mi vida, dejar de preocuparme tanto por el.
Como me gustaría que esto no sean solo palabras, pero por ahora lo son. Necesito olvidarme de el, VOY a olvidarme de el.
Hoy cayó la gota que rebalso el vaso.