viernes, 3 de diciembre de 2010

Te juro que a nadie le he vuelto a decir que tenemos el récord del mundo en querernos. Y por eso esperaba con la carita empapada que llegaras con rosas, y mil rosas para mi. Porque ya sabes que me encantan esas cosas, Qué me importa si es muy tonto? soy así. Y hoy me parece mentira que se escape mi vida imaginando que vuelves a pasarte por aquí, donde los viernes, cada tarde como siempre, la esperanza dice que te quise así. Escapando una noche de un bostezo de sol me pediste que te diera un beso, con lo barato que salen mi amor, qué te cuesta callarme con uno de esos? Pasaron seis meses y me dijiste adiós, un placer coincidir en ésta vida, ahí me quedé con el alma en el corazón y la otra excusa que ni tu entendías. Y es que empiezo a pensar que el amor verdadero es tan sólo el primero, y es que empiezo a sospechar que los demás son solo para olvidar.